sábado, 13 de abril de 2024

Algo más que desalar


Claro que en el nivel que nos hemos puesto de crecimiento poblacional, a un ritmo que este último cuarto de siglo supera en muchos casos el 60% de aumento en número de habitantes en varios municipios del sur de Tenerife, requerimos de la desalación de agua de mar para atender la demanda local y la presión turística (sobre 920.000 habitantes que consumen 211 litros/día cada uno a lo que se suma una población flotante de 120.000 turistas que demandan unos 480 litros/día por visitante). No, ese debate -para bien o para mal- no procede ya a estas alturas, máxime cuando la demanda urbano-turística representa en Tenerife porcentajes superiores al 50%, bastante por arriba ya de la demanda agrícola que en otros territorios de la Europa desarrollada se mantienen, como ocurría aquí hace unas décadas, en el entorno del 80%. Y no siempre por derroche, no, sino porque la producción de alimentos requiere agua y aquella sigue siendo un elemento estratégico en la economía local y global lo miremos por donde lo miremos.